El papel de la mujer en la política en el departamento del Putumayo, siempre ha sido relegado, se ha utilizado a la mujer para abrir el camino político de los candidatos masculinos, pero ello no les ha garantizado la asignación de puestos de poder; sin embargo destacamos que la mujer cuando asume un cargo lo hace con más responsabilidad siendo ellas más organizadas, propositivas y resolutivas, teniendo como bandera el sentido de pertenencia y el deseo de sacar adelante todos los proyectos que conllevan al crecimiento de nuestro territorio.
Las mujeres piensan en el desarrollo del territorio, buscando la mejora continua y visualizando las verdades políticas como el arte de servir a la colectividad. En cuanto a las agendas de paz de las mujeres hay que mencionar que el papel de la mujer es transversal, por ejemplo, en el acuerdo de Paz se hizo incidencia en todos los puntos del mismo, pero no se ha materializado nada concreto, así mismo está pasando con los planes de gobierno y las políticas públicas en cada uno de los territorios, empezando por que los gobiernos de turno no han dado importancia a la mujer y al papel que ella tiene en la transformación social.
Sin embargo, las mujeres están dejando de lado los temores, las dudas y las limitaciones que la sociedad machista les hace creer, las mujeres de hoy se arriesgan toman decisiones en conjunto y a beneficio de todas pensando en el desarrollo personal, social y territorial.
Es importante resaltar que las ideas de las mujeres de este territorio fueron uno de los ejes centrales para la construcción y el sostenimiento del Acuerdo Final de Paz, ya que por primera vez su voz y participación hizo parte del proceso de construcción e implementación, en el cual estableció una Subcomisión de Género, mecanismo que incorporó transversalmente los asuntos relativos al género en todos los puntos de la agenda, a través de medidas específicas para mejorar la vida de las mujeres.
Por lo tanto, una agenda de Paz para las mujeres en el territorio, es de suma importancia, ya que permitiría contribuir en los procesos de gobernabilidad y de incidencia Política, para dar a conocer identificar y visibilizar las diversas necesidades y problemáticas que viven actualmente las mujeres. En este entendido, es necesario garantizar los espacios de interlocución y concertación entre las mujeres y el gobierno para llevar a cabo la articulación de procesos y organizaciones, para analizar y tratar los temas que sean propuestos en los planes de gobierno a nivel local y territorial en pro de la reivindicación y garantía de los derechos de las mujeres, como son la educación, salud, emprendimiento laboral, la convivencia y seguridad ciudadana, la paz.
Conforme pasa el tiempo son más las fuerzas a favor que las mujeres tienen como protagonistas de paz, ya que se han obtenido logros que hoy en día los han alcanzado en los acuerdos de paz, por lo tanto es apremiante que tengan la oportunidad de poder trabajar, ser escuchadas y participar en la construcción y /o implementación de dichas agendas para el territorio, las cuales suman a la construcción de la paz, la democracia, la seguridad y la transformación de la vida de las mujeres dentro de la sociedad.
Las agendas de Paz de las mujeres están encaminadas a la igualdad, el empoderamiento, el emprendimiento, y las alianzas. Garantizando la protección de los derechos humanos y fomentando la participación significativa en los procesos de toma de decisiones y el crecimiento del sentido social que se ha resquebrajado en este territorio.
Los ejes principales de las agendas de Paz para las mujeres del territorio está basada en el fortalecimiento de las mujeres en espacios de participación tales como: las Mesas de Participación Efectiva de las Víctimas, principalmente con los enfoque de género, Consejo Territorial de Planeación, Consejo Municipal de Derechos Humanos, Consejo Municipal de Desarrollo Social, como máxima instancia de decisión, al igual que la coordinación y concertación, Consejo Municipal de Desarrollo Rural CMDR, Comité Local de Justicia, Consejo Municipal de Mujeres, Comité municipal de seguridad alimentaria y nutricional con enfoque de derecho humano a la alimentación, entre otros.
La Participación en el poder y autonomía en los procesos de aceptación en la toma de decisiones, desde un punto de vista social y política para la inclusión efectiva de las mujeres. La autonomía física, libertad y derechos de la mujer. (Derecho a la salud, derecho a una vida plena y libre de violencia). – Autonomía e inclusión económica de las mujeres para su empoderamiento y generación de capacidades para el trabajo y de ingresos, reconocimiento y visibilización de la mujer como eje esencial de la sociedad.
Dentro de los procesos desfavorables también podemos encontrar la falta de oportunidades para acceder a la educación, el medio ambiente y los cambios climáticos, sumado a la cohesión social, Competencia desleal, la economía, las dificultades para obtener empleo, la reconstrucción ética, los sistemas de salud, el régimen político y los desbalances del estado. Además de la discriminación a la mujer por parte de algunos partidos políticos y en la esfera política, por considerarse a la mujer como el sexo débil.
De manera general puede decirse que el simple hecho de que una mujer aspire a la política, ya puede ser víctima de violencia política, generada por la intimidación, coerción o agresión, en las reuniones públicas y la utilización de lenguaje sexista en los medios de comunicación y redes sociales, y por la existencia del machismo, buscan la forma de generar discriminación por motivos de género, para desmotivar o desalentar el ejercicio y la continuación política, cosas que afectan ampliamente la autoestima de la mujer que decide lanzarse a las esferas de lo público.